Educación elimina monitores para ajustar las clases extraescolares "a la demanda"

No es justo que se haga esto con 1000 personas, es decir 1000 personas que se van a quedar sin empleo y alumnos que no van a poder dar clases extraescolares

Educación asegura que aún no se puede cuantificar, pero el tijeretazo final dependerá de la petición de los centros. La medida afecta a 2.000 monitores y los sindicatos, que cifran un recorte en 1.000.

Inquietud e incertidumbre. Es el ambiente que se respira entre los casi 2.000 monitores de Actividades Formativas Complementarias (AFC) que trabajan en los colegios públicos y concertados de Extremadura. La revisión del decreto de la Consejería de Educación que regula esta actividad, actualmente en tramitación, servirá este año para ajustar las actividades que se ofertan a la "demandas reales" de los centros, evitando "duplicidades" de actividades que llevan años también ofertando otras entidades, lo que supondrá por tanto, "recortar" el número trabajadores que se encargan de su impartición en los centros escolares por las tardes. La Junta confirma que habrá menos monitores, pero que ese recorte "no se puede cuantificar todavía" porque "va a depender de la demanda de los centros educativos". Sin embargo, los sindicatos hablan de mil plazas menos el próximo curso y estudian movilizaciones desde el 21 de enero.

La consejería asegura que desaparecerán "aquellas actividades con un escaso número de solicitudes por parte de los centros", las que ya se oferten a través de otras administraciones, para "optimizar los recursos públicos", y en el caso de estas que son principalmente Educación Física y Deportiva y Música (hay escuelas municipales de música en muchas localidades), el "nuevo decreto prevé su oferta en colegios de municipios menores de 5.000 habitantes en donde no sean ofertadas por los ayuntamientos o mancomunidades". Todo ello, según Educación, con el objetivo de adecuar las actividades extraescolares a la Ley de Educación, donde están contempladas "con el objetivo de completar la acción educativa del alumnado, para lo cual deben estar en estrecha relación con los objetivos educativos de la región, a fin de buscar el éxito de todo el alumnado", afirma. Se trata de crear un nuevo modelo con actividades de "mayor calidad, ajustadas a la demanda del alumnado y optimizar mejor los recursos públicos", resume.

Uno de los motivos que esgrime la consejería para eliminar, principalmente, la educación física como actividad extraescolar es economizar recursos.

NUEVO MODELO DEPORTIVO Y es que la Consejería de los Jóvenes y el Deporte lleva años también ofertando programas de deporte en edad escolar, como los Judex, el Plan de Dinamización Deportiva --que se oferta a través de las mancomunidades y ayuntamientos desde esta consejería-- y escuelas deportivas municipales, principalmente. "Todas estas actividades no pueden seguir caminando cada una por su lado sin estar coordinados", señalan fuentes de esta consejería, que plantean un nuevo modelo de gestión deportiva, sin actividades formativas complementarias en este área. Esto implicaría, a través del asociacionismo, la "inserción real de nuestros escolares de primaria en los clubes y asociaciones de la localidad", por lo que, apuntan, "nos aseguramos que tras el abandono del centro escolar y su paso a la Secundaria --donde no existe el programa AFC-- el alumno está insertado en un club donde continuar la práctica deportiva y dar continuidad así a nuestro principal objetivo: desarrollo de hábitos de vida saludables". Un nuevo programa deportivo que se ofertaría a través de subvenciones a asociaciones deportivas locales, Ampas, federaciones, etcétera, y que supondría un ahorro de un millón de euros.

Según el proyecto de la Consejería de los Jóvenes y el Deporte, el presupuesto de los alrededor de 400 monitores de extraescolares en la modalidad específica de actividades deportivas se cifra en 4.000.0000 euros, mientras que el nuevo planteamiento supondría 2,9 millones de euros.

CRITICA SINDICAL Esta situación evidencia también una falta de coordinación entre consejerías que se viene manteniendo desde hace años y que ahora costarán al menos el recorte de mil monitores de actividades extraescolares, según denuncia el sindicato PIDE, algo "inaceptable". El sindicato critica que Educación sin negociación previa, quiere "imponer" unilateralmente este "drástico" recorte, pese a que el Consejo Escolar de Extremadura ha aprobado un dictamen en el que recomienda mantener la cifra de monitores.

A su juicio, es una nueva "agresión laboral" que se suma a la anterior reducción de haberes "injustificada" en sus nóminas, cuando los emolumentos de los monitores no alcanzan el 1,5% del salario mínimo.

Eso mismo opina el sindicato ANPE. Su secretario regional de Acción Sindical, Saturnino Acosta, asegura que "es incomprensible en primer lugar el más que probable recorte en monitores, bastante más de la mitad de los actuales, e incluso el nuevo decreto de dichas actividades pues no solo se pretende limitar y recortar monitores, también la Junta está interfiriendo en decisiones que competen al Consejo Escolar del centro", ya que solo ofertará, comenta, Fomento de la Lectura, Estudio Dirigido, Teatro, Ajedrez, Francés, Inglés, Portugués, TICs, Psicomotricidad, Iniciativa Emprendedora e Inteligencia Emocional, "cuando debe ser el Consejo Escolar quien decida qué actividades son las necesarias para completar la formación integral de los alumnos que cursan estudios en la localidad".

Como ejemplo sencillo señala las actividades musicales en zonas rurales, ya que muchas localidades pequeñas carecen de escuelas municipales o actividades relacionadas, indica. Además en cuanto al tipo de actividades tanto inglés, francés como portugués son enseñanzas curriculares "que no deben estar incluidas en las actividades formativas" cuyo fin no es el de dar clases particulares si no el de compensar la formación integral con otro tipo de actividades distintas a estas, aclara. En Extremadura, reitera Acosta, hay muchas localidades pequeñas que no tienen oferta formativa por las tardes, por lo que "limitarlas o encasillarlas nos parece contraproducente". Por todo ello, este sindicato ha iniciado una campaña de recogida de firmas en contra de esta medida, "que puede afectar seriamente a la conciliación de la vida laboral y familiar".